No sufrieron por los exámenes ni por males de amores, tampoco tuvieron que lidiar con sus maestros y mucho menos con el prefecto Gastón... los alumnos de la Elite Way School abandonaron “el cole” para convertir el Estadio Revolución en un auténtico volcán de emociones, en el sitio donde grandes y chicos, hombres y mujeres se proclamaron miembros de la “generación Rebelde'
No sufrieron por los exámenes ni por males de amores, tampoco tuvieron que lidiar con sus maestros y mucho menos con el prefecto Gastón... los alumnos de la Elite Way School abandonaron “el cole” para convertir el Estadio Revolución en un auténtico volcán de emociones, en el sitio donde grandes y chicos, hombres y mujeres se proclamaron miembros de la “generación Rebelde"Foto: EL SIGLO DE TORREÓN 11 de junio de 2005
publicada el 11 de junio de 2005