Los resultados de las pruebas diagnósticas están demorados. El oxígeno médico es escaso. Los hospitales tienen poco personal y están desbordados. Las unidades de terapia intensiva están llenas. Casi todos los respiradores están en uso, y los muertos se acumulan en crematorios y cementerios. A las fueras de Mumbai, en el campo de cremación en Virar West, familiares y trabajadores observan como se consumen entre las llamas las piras funerarias hechas para las víctimas mortales de COVID-19, que no han alcanzado a ingresar a los crematorios o ser enterradas en cementerios, imágenes que han trascendido en redes sociales.
Autor: EFE.- , publicada el 23 de abril de 2021