Los grupos insurgentes tomaron el control de aldeas estratégicas que salpican la costa de la provincia norteña de Cabo Delgado, que se encuentran a más de 100 kilómetros (62 millas) de la capital provincial, Pemba. Los grupos militantes islámicos radicales que buscan establecer un estado islámico en la región, como Ansar al-Sunna, se han atribuido la responsabilidad de algunos de estos ataques durante el año pasado.
Autor: EFE, publicada el 21 de julio de 2020