La cuarta pared se rompió. Los actores hicieron del público un personaje más.La luna ‘Jélica’ brillaba sobre un callejón. Había escondites por doquier, pasadizos “secretos” por donde salían gatos inesperadamente: de arriba o abajo, de la derecha o la izquierda, de una orilla o del fondo.
Autor: JOSÉ A. RODRÍGUEZ , publicada el 27 de octubre de 2019