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Parte de la ciclovia no puede ser utilizada ya que se encuentra entre la maleza y no se encuentra pavimentada de la forma adecuada.

Parte de la ciclovia no puede ser utilizada ya que se encuentra entre la maleza y no se encuentra pavimentada de la forma adecuada.

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Pedalean entre la maleza

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Parte de la ciclovia no puede ser utilizada ya que se encuentra entre la maleza y no se encuentra pavimentada de la forma adecuada. Parte de la ciclovia no puede ser utilizada ya que se encuentra entre la maleza y no se encuentra pavimentada de la forma adecuada.

Parte de la ciclovia no puede ser utilizada ya que se encuentra entre la maleza y no se encuentra pavimentada de la forma adecuada.En la carretera a Mieleras se encuentra una de las pocas ciclovías de la ciudad, sin embargo, las condiciones en las que se encuentra no son las adecuadas para que las personas que deciden usar la bicicleta como medio de transporte puedan utilizarla. Es a partir del Parque Industrial, ubicado en la intersección con la calzada Gómez Morín, donde la ciclovía da inicio y entre que en algunos tramos y en otros no posible localizarla, llega hasta el bulevar ferropuertos, donde se encuentra el Parque Industrial con el mismo nombre. La vialidad establecida para el uso de las bicicletas se encuentra en mal estado, lleno de hierba y maleza prácticamente en la totalidad del recorrido, mientras que otros tramos presentan encharcamientos que imposibilitan el uso hasta para los peatones. La ciclovía no está pavimentada en su totalidad y en el paso elevado del bulevar Laguna Sur, la misma se descompone en su totalidad, dando paso a un espacio irregular rodeado de maleza y basura que podría representar también un foco de infección para las personas. Incluso varias prefieren bajar a la carretera y sentir los automóviles y el transporte público rozar que atravesar ese tramo. Sin embargo, de pronto la ciclovía vuelve a hacer acto de presencia, pues casi al llegar a la intersección con el bulevar ferropuertos se puede hallar una vialidad de unos 100 metros destinada a los ciclistas para posteriormente dar vuelta en el mismo y seguir su camino hasta su respectivo trabajo en alguna de las industrias ahí instaladas. Sumado a lo anterior, todo tipo de vehículos de carga se estacionan a un lado de la banqueta, dejando un espacio limitado para las personas que usan la bicicleta y una vez más vuelven a rozarse con vehículos que circulan a altas velocidades. Así pues, una de las pocas ciclovías de la ciudad no cuenta con el mantenimiento adecuado para su uso, los obstáculos van desde falta de pavimentación, maleza y encharcamientos, por lo que las personas que deciden usar la bicicleta como transporte emplean el espacio de los automóviles.

Autor: EL SIGLO DE TORREÓN, publicada el 27 de abril de 2019

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