Fue el olor lo que alertó a vecinos de la zona a pedir el auxilio de Protección Civil, cuyos elementos se percataron del riesgo al llegar.
El mal manejo de una decena de toneladas de sosa cáustica, que no se aisló adecuadamente de una cantidad no precisada de amoniaco, provocó una alerta química al nororiente de la ciudad, lo que obligó al aislamiento de varias cuadras cercanas al Hospital General 450.
Autor: EL SIGLO DE DURANGO, publicada el 09 de agosto de 2017