Bastaron tres lámparas, algunos cajones, una silla, zapatos, un muñeco y una cuerda para presentar la historia que se centra en ‘Peter’, un hombre tímido que enfrenta a la muerte tras no cumplir el sueño de su vida. Solo, en el escenario, el actor Erik Martínez dio vida a complejos personajes en una historia protagonizada por la desesperanza y la tristeza bajo la producción del grupo de teatro Proscenio.
Autor: ROBERTO CÁRDENAS ORONA, publicada el 24 de marzo de 2017