Desde el mismo día de su muerte, miles manifestaron sus respetos acompañando sus restos hacia la capilla ardiente.La duquesa de Alba, la aristócrata con más títulos nobiliarios del mundo y fallecida a los 88 años, fue despedida en Sevilla con un aplauso popular y una misa en la que estuvieron presentes autoridades del Estado español.
Autor: EFE, publicada el 21 de noviembre de 2014