El espíritu conciliador de Mandela pareció estar presente cuando Obama, al dirigirse al estrado, le estrechó la mano al presidente de Cuba, Raúl Castro, en un gesto sin precedentes entre los líderes de dos naciones en conflicto desde hace décadas.Líderes mundiales agradecieron al pueblo sudafricano el gran ejemplo que dio el expresidente Nelson Mandela como incansable luchador por la libertad, durante el servicio religioso oficiado en su memoria en el estadio de fútbol FNB de Soweto, en Johannesburgo.
Autor: EFE Y AP, publicada el 10 de diciembre de 2013