Al igual que en la transmisión televisiva, en el espectáculo del sábado no contaron con guión alguno; los conductores se limitaron a hacer bromas y caracterizar a la licenciada Pamela Juanjo, Omarcito y a la viejita más mal hablada y consentida de México, Doña Cleta.
Al igual que en la transmisión televisiva, en el espectáculo del sábado no contaron con guión alguno; los conductores se limitaron a hacer bromas y caracterizar a la licenciada Pamela Juanjo, Omarcito y a la viejita más mal hablada y consentida de México, Doña Cleta.Foto: Ramón Sotomayor 08 de diciembre de 2003
publicada el 08 de diciembre de 2003