La barra de la Adicción arribó a territorio visitante y tardaron cerca 20 minutos en ingresar al cotejo de vuelta de la Gran Final de Concachampions.La afición de Santos despertó en la Final de ida de la Concachampions con el grito de "sí se puede, sí se puede", para alentar a su equipo en contra de los Rayados, pero al final quedó desilusionada.
Autor: El Siglo de Torreón., publicada el 25 de abril de 2012