MacKinnon, de 47, creció cerca de Boston y trabaja en el instituto médico Howard Hughes de la universidad Rockefeller, en Nueva York. La contribución de MacKinnon fue en el campo de los canales de iones, que son proteínas que abarcan una membrana y forman un sendero para el flujo de iones no orgánicos a través de la membranas celulares. Los canales de iones controlan el ritmo del corazón, regulan la secreción de hormonas y generan los impulsos eléctricos que subrayan la información transferida al sistema nervioso.
MacKinnon, de 47, creció cerca de Boston y trabaja en el instituto médico Howard Hughes de la universidad Rockefeller, en Nueva York. La contribución de MacKinnon fue en el campo de los canales de iones, que son proteínas que abarcan una membrana y forman un sendero para el flujo de iones no orgánicos a través de la membranas celulares. Los canales de iones controlan el ritmo del corazón, regulan la secreción de hormonas y generan los impulsos eléctricos que subrayan la información transferida al sistema nervioso.Foto: AP, Reuters 10 octubre 2003
publicada el 10 de octubre de 2003