El delirio de un estadio que entonó cada estrofa, bailó cada nota y se movió al ritmo que marcó Juan Luis Guerra precedió al adiós y a las nostalgia. Los Panamericanos son ya de Río de Janeiro
El delirio de un estadio que entonó cada estrofa, bailó cada nota y se movió al ritmo que marcó Juan Luis Guerra precedió al adiós y a las nostalgia. Los Panamericanos son ya de Río de JaneiroFoto: AP, Reuters 18 agosto 2003
publicada el 18 de agosto de 2003