Para continuar acceda como suscriptor.

Ya soy suscriptorSuscribirme o asociar mi suscripción impresa
Cuando se anuncia la bajada hay que gritar, golpear el metal o acercarse pronto a la puerta, que comúnmente es la misma que de entrada, ya que la trasera suele estar descompuesta, atorada o simplemente no existe. 

Al abandonar la unidad, algunas veces es necesario asomar primero la cabeza para ver si no viene ningún otro vehículo que pueda arrollar, ya que al chofer se le ocurre detenerse bastante lejos de la banqueta.

Cuando se anuncia la bajada hay que gritar, golpear el metal o acercarse pronto a la puerta, que comúnmente es la misma que de entrada, ya que la trasera suele estar descompuesta, atorada o simplemente no existe. Al abandonar la unidad, algunas veces es necesario asomar primero la cabeza para ver si no viene ningún otro vehículo que pueda arrollar, ya que al chofer se le ocurre detenerse bastante lejos de la banqueta.

2 de 10 » Cuando se anuncia la bajada hay que gritar, golpear el metal o acercarse pronto a la puerta, que comúnmente es la misma que de entrada, ya que la trasera suele estar descompuesta, atorada o simplemente no existe. Al abandonar la unidad, algunas veces es necesario asomar primero la cabeza para ver si no viene ningún otro vehículo que pueda arrollar, ya que al chofer se le ocurre detenerse bastante lejos de la banqueta.

Viajar en camión, experiencia nada grata

Descarga » galerías » más vistas

Cuando se anuncia la bajada hay que gritar, golpear el metal o acercarse pronto a la puerta, que comúnmente es la misma que de entrada, ya que la trasera suele estar descompuesta, atorada o simplemente no existe. 

Al abandonar la unidad, algunas veces es necesario asomar primero la cabeza para ver si no viene ningún otro vehículo que pueda arrollar, ya que al chofer se le ocurre detenerse bastante lejos de la banqueta. Cuando se anuncia la bajada hay que gritar, golpear el metal o acercarse pronto a la puerta, que comúnmente es la misma que de entrada, ya que la trasera suele estar descompuesta, atorada o simplemente no existe. 

Al abandonar la unidad, algunas veces es necesario asomar primero la cabeza para ver si no viene ningún otro vehículo que pueda arrollar, ya que al chofer se le ocurre detenerse bastante lejos de la banqueta.

Cuando se anuncia la bajada hay que gritar, golpear el metal o acercarse pronto a la puerta, que comúnmente es la misma que de entrada, ya que la trasera suele estar descompuesta, atorada o simplemente no existe.

Al abandonar la unidad, algunas veces es necesario asomar primero la cabeza para ver si no viene ningún otro vehículo que pueda arrollar, ya que al chofer se le ocurre detenerse bastante lejos de la banqueta.Transporte público. Viajar en camión es ser partícipe de un 'concierto de ruido' Autobuses Torreón- Gómez- Lerdo, se encuentran en pésimas condiciones. EL SIGLO DE TORREÓN.

publicada el 28 de julio de 2003

Galería completa: Viajar en camión, experiencia nada grata

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok