En plena canícula de junio, el hombre Ferre para los calores venideros viste con trajes blancos como si fueran simples camisas, tejanos de lino y corbatas de hilo de escocia, y se zambulle en un juego de luces y sombras en un mar de lunares negros y blancos.
En plena canícula de junio, el hombre Ferre para los calores venideros viste con trajes blancos como si fueran simples camisas, tejanos de lino y corbatas de hilo de escocia, y se zambulle en un juego de luces y sombras en un mar de lunares negros y blancos.Foto: AP 26 junio 2003
publicada el 26 de junio de 2003