Fiel a su recorrido y a su imagen se mantiene Betarice Trussardi, que volvió a apostar desde la pasarela de Milán por los valores de siempre de la casa de modas, con especial atención a su culto reverencial por la pieles.
Fiel a su recorrido y a su imagen se mantiene Betarice Trussardi, que volvió a apostar desde la pasarela de Milán por los valores de siempre de la casa de modas, con especial atención a su culto reverencial por la pieles.Foto: AP 24 junio 2003
publicada el 24 de junio de 2003