Cuatro años después de la caída de Saddam, la ciudadanía iraquí está más dividida que nunca, mientras analistas y políticos muestran cada vez más su temor de que la situación desemboque en un conflicto étnico y religioso.
2 de 13
»
Cuatro años después de la caída de Saddam, la ciudadanía iraquí está más dividida que nunca, mientras analistas y políticos muestran cada vez más su temor de que la situación desemboque en un conflicto étnico y religioso.
Cuatro años después de la caída de Saddam, la ciudadanía iraquí está más dividida que nunca, mientras analistas y políticos muestran cada vez más su temor de que la situación desemboque en un conflicto étnico y religioso.Foto: EFE y AP
09 de abril 2007