María Ifigenia Basa, una ama de casa del sur de la ciudad de México, salió a hacer las compras para la comida y terminó en un lugar que en otras circunstancias le habría obligado a invertir mucho más que sólo una caminata de unas cuantas cuadras como ahora: la playa.
María Ifigenia Basa, una ama de casa del sur de la ciudad de México, salió a hacer las compras para la comida y terminó en un lugar que en otras circunstancias le habría obligado a invertir mucho más que sólo una caminata de unas cuantas cuadras como ahora: la playa.FOTOS: EL SIGLO DE TORREON / EFE
publicada el 04 de abril de 2007