Por tercer año de los últimos cuatro, por tercera ocasión en la era Diego Simeone y por quinta vez en sus 16 participaciones, el Atlético de Madrid no llegó más allá de los octavos de final de la Copa de Europa o la Liga de Campeones, en contraste con el pasado curso, cuando sí alcanzó la siguiente ronda, aunque fue eliminado por el Leipzig a único encuentro en Lisboa.