Seguidores del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, protestaron este domingo en las principales ciudades del país, como Sao Paulo, Río de Janeiro, Brasilia y Belo Horizonte, contra las medidas restrictivas impuestas por los Gobiernos regionales para frenar la pandemia de la COVID. Brasil registró el sábado cerca de 2,000 muertes por la enfermedad, con lo que el promedio de fallecimientos en la última semana se ubicó por encima de las 1,800 diarias por primera vez desde el inicio de la crisis. De acuerdo con el Ministerio de Salud, Brasil acumulaba hasta el sábado 277,091 muertes y 11.4 millones de contagios, que lo convierten en el segundo país en el mundo con más víctimas y casos de COVID, solo superado por Estados Unidos.