La final del Torneo Guardianes 2021, que se realizó ayer por la noche en el estadio Azteca en la Ciudad de México, obligó a los laguneros a "vivirla" desde las pantallas de sus hogares o de los restaurantes y bares de la zona Centro de la ciudad de Torreón, pretexto perfecto para estar en familia y con amigos.
Para evitar disturbios y conatos de riña, las autoridades de seguridad de los tres niveles de gobierno continuaron con el megaoperativo de vigilancia para resguardar la integridad de la afición albiverde y de los edificios del primer cuadro del municipio, epicentro de los festejos.
A diferencia del partido de ida, realizado el jueves por la noche, en esta ocasión el cierre de las principales vialidades fue parcial, pues los automovilistas sí pudieron circular por la calzada Colón.
Pese a que no se auguraba un buen pronóstico para los Guerreros, la afición se reunió para anhelar juntos la séptima estrella.
Al caer la tarde la "lluvia lagunera", como son conocidas las tolvaneras, se hizo presente mientras los elementos de seguridad se desplegaban por la región Lagunera y los aficionados empezaban a pintar de verde y blanco los establecimientos que contaran con una pantalla.
GOL DE LA ESPERANZA
Al minuto 36 del primer tiempo, el Azteca guardó silencio mientras la Comarca Lagunera vibraba con el gol de la esperanza del chileno Diego Valdés. En el marcador global, los equipos estaban empatados.
En las calles de Torreón, el júbilo no cabía entre los aficionados del Santos, todos se hermanaban.
Al silbatazo de la segunda parte de la gran final, la Presidencia Municipal, el Cerro de las Noas y otros edificios emblemáticos de Torreón se pintaron de verde, pese a la lluvia de tierra que aún estaba presente.
Por su parte, el corredor comercial de la Morelos cada vez se hacía más pequeño ante el gran número de santistas que seguían llegando.
Pocos seguidores del Cruz Azul festejaron el gol de Jonathan Rodríguez, justo al minuto 50 del segundo tiempo; sin embargo, los ánimos no decaían, al contrario, los cánticos para los Guerreros tomaron más fuerza.
Incluso, una patrulla de la Policía Metropolitana animaba a la afición con el cláxon durante sus recorridos de vigilancia.
Conforme se acababa el partido, con todo y tiempo extra, la afición albiverde no perdía la esperanza de conseguir el triunfo.
Al concluir la gran final del futbol mexicano, algunos cruzazulinos lloraron de la emoción. Por fin termina la maldición del Cruz Azul: luego de 23 años conquistó el título de la Liga MX.
David Villarreal, lagunero con "sangre azul", festejó en solitario el triunfo del Cruz Azul y agradeció que el Santos Laguna fuera un "escalón" para lograr el tan anhelado campeonato.
FESTEJAN SUBCAMPEONATO
El cerco de seguridad que se montó en la explanada de la Plaza Mayor no fue obstáculo para que algunos santistas llegaran al lugar a celebrar el subcampeonato.
En un acto amoroso, el espacio público fue escenario de una pareja de enamorados que en plenas escalinatas de la Presidencia, se comprometió.
Esta vez no hubo desmanes, ni nada qué lamentar, únicamente la ausencia de cubrebocas en algunas personas.
Hasta los primeros minutos de este lunes, la fiesta continuó y el canto santista de un "Un Guerrero nunca muere", no se dejó de corear.
Aficionados del Santos Laguna se reunieron en la Plaza Mayor a festejar el subcampeonato de los Guerreros. (ESPECIAL)
