Los patrones de muerte por coronavirus en Estados Unidos cambiaron durante el verano.
Estados Unidos alcanzó este viernes la cifra de 8,040,922 casos confirmados y 218,455 fallecidos por el coronavirus, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.
Este balance a las 20:00 hora local es de 66,420 contagios más que el jueves y de 710 nuevas muertes.
Pese a que Nueva York ya no es el estado con un mayor número de contagios, sí sigue como el más golpeado en cuanto a muertos en Estados Unidos con 33,337, cifra parecida a Perú, España o Francia.
Tan solo en la ciudad de Nueva York han muerto 23,915 personas.
A Nueva York le siguen en número de fallecidos Texas (17,371), California (16,856), Nueva Jersey (16,202) y Florida (15,830).
Otros estados con un gran número de muertos son Massachusetts (9,702), Illinois (9,425), Pennsylvania (8,434), Georgia (7,556) y Michigan (7,317).
En cuanto a contagios, California suma 869,825, le sigue Texas con 842,868, tercero es Florida con 748,437 y Nueva York es cuarto con 481,107.
El balance provisional de fallecidos -218,455- supera con creces la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100,000 y 240,000 muertes a causa de la pandemia.
El presidente estadounidense, Donald Trump, rebajó esas estimaciones y se mostró confiado en que la cifra final estaría más bien entre los 50,000 y 60,000 fallecidos, aunque luego auguró hasta 110,000 muertos, un número que también se ha superado.
Por su parte, el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calcula que para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre Estados Unidos llegará a los 230,000 fallecidos y para el 31 de diciembre a los 320,000.
DECESOS DE HISPANOS
Los patrones de muertes por coronavirus en Estados Unidos cambiaron durante el verano, ya que hubo un aumento en el porcentaje de fallecimientos de hispanos y de personas que viven en el sur y el oeste del país, de acuerdo con un nuevo informe gubernamental publicado el viernes.
En el reporte difundido por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) se analizaron las muertes asociadas al coronavirus registradas entre el 1 de mayo y el 31 de agosto. El informe actualiza uno previo enfocado en los fallecimientos durante la ola inicial de la epidemia a principios de año que afectó principalmente el noreste.
De acuerdo con el reporte, más de tres quintas partes de las muertes de agosto estaban ocurriendo en estados del sur, y más de una quinta parte en estados del oeste. Las muertes de hispanos representaron 24% del total de fallecimientos en agosto.
También mostró una baja en las muertes en asilos, de 30% en mayo a 17% en agosto, respecto del total de fallecimientos.
Las personas blancas representaron 51% de las muertes a finales de la primavera y durante el verano, en comparación con el 40% de principios de la primavera. La proporción de muertes entre personas de raza negra bajó de 25% a principios de la primavera a 19% en el verano.