La eutanasia en las mascotas es un método bajo el cual se lleva a cabo la muerte inducida, por medio de fármacos que lo lleven a un estado plácido y sin dolor. (ARCHIVO)
La eutanasia en las mascotas es un método bajo el cual se lleva a cabo la muerte inducida, por medio de fármacos que lo lleven a un estado plácido y sin dolor.
Este puede ser uno de los momentos más difíciles para la familia que lo acompaña, incluso en muchas ocasiones ciertos miembros no se encuentran listos para presenciarlo.
Tomar la decisión de “dormir” a tu perro debe ser una opción que se tomó de forma tranquila y serena, pensando en lo más conveniente para él.
Según el sitio Consumer, los veterinarios expertos reconocen determinados escenarios bajo los cuales es recomendable darle una muerte digna a tu can antes de que las cosas puedan empeorar.
Para un perro con un delicado estado de salud, esta opción debe quedar siempre abierta. Las enfermedades crónicas irreversibles como el cáncer, en un ejemplo de situación bajo el cual debe considerarse la eutanasia.
Las enfermedades degenerativas pueden llevar al perro a un sufrimiento extremo, ya que con el tiempo los órganos vitales comenzarán a fallar, llevando consigo más complicaciones. También un daño excesivo en un accidente puede ser otra razón para considerar la eutanasia.
En el caso de los perros ancianos, deben tomar en cuenta que no todas las razas envejecen al mismo paso. En el caso de los perros pequeños son más longevos que los de mayor tamaño.
Muchos perros pueden llegar a vivir incluso 15 años, sin embargo, es muy probable que al llegar a una edad determinada comience con ciertos malestares. Puede comenzar con algunos como pérdida del oído y vista y tornarse más complicado con padecimiento como, por ejemplo, displasia de cadera.
Cuando sus dolencias son irreversibles y lo hacen llevar una vida cansada, puede ser un buen momento para considerar la eutanasia.
Dormir a un perro puede ser un tema difícil de tratar bajo la duda que suelen plantearse todos los dueños, y es si sufrirá cuando suceda.
La ausencia de dolor, sedación o la anestesia total previa son requisitos obligatorios para poder llevar a cabo este procedimiento. Otro de los aspectos a tener en cuenta es la psicología del perro, ya que así como se busca evitar su sufrimiento físico, también es recomendable que esté acompañado de quien estuvo con él toda su vida cuando sea el momento de suministrar el fármaco.
Recuerda que esta decisión debe ser tomada tranquilamente conociendo toda la información previa que necesites para estar tranquilo con tu decisión.
