El 0-0 en Champions se da apenas tres días después de una dura derrota 3-1 de visita al Levante en LaLiga. (EFE)
Barcelona debió conformarse el martes con un insípido empate 0-0 en casa ante el Slavia Praga por la fase de grupos de la Liga de Campeones.
Los más cerca que el club catalán estuvo cerca del gol fue cuando un remate de zurda de Lionel Messi se estrelló en el ángulo superior derecho a los 35 minutos.
El arquero visitante Ondrej Kolar brilló con sus intervenciones al repeler remates a gol de Messi, Gerard Piqué y Sergi Roberto.
La igualdad afianzó al Barcelona en la cima del Grupo F con ocho puntos, mientras que los checos siguen hundido en el fondo con dos. Borussia Dortmund y el Inter de Milán, ambos con cuatro unidades, se medían más tarde para completar la cuarta jornada.
Barcelona estiró a 34 su racha de partidos sin perder como local en competiciones europea, remontándose a 2013.
Pero fue un resultado que sólo acentuó las dudas por el reciente flojo nivel de los azulgranas.
El 0-0 se dio apenas tres días después de una fea derrota 3-1 de visita al Levante en la Liga española, poniendo fin a una seguidilla de siete victorias.
Apenas dos semanas antes, el Barça ganó sufriendo 2-1 en Praga.
Piqué se perderá el siguiente partido ante el Dortmund, el 27 de noviembre, por acumulación de tarjetas tras ser amonestado en la primera parte.
