Gabriela Pérez Martínez, pareja de Fernando Castro Orozco, fallecido tras ser golpeado durante una riña afuera de la Cervecería Chapultepec en Gómez Palacio, culpa a agentes de la Policía Municipal de Gómez Palacio y a guardias de seguridad del bar de su muerte y exige justicia para su familia.
En entrevista en la ciudad de Torreón, la mujer explicó a detalle su versión de los hechos y detalló la forma en la que vivió este suceso.
Relata que cuando salían del bar, vio que a su hijo Eduardo Daniel Reyes Pérez era golpeado por los guardias de seguridad del local, motivo por el cual ella y su pareja intentaron intervenir; sin embargo, también fueron agredidos físicamente por el personal.
Comenta que alcanzó a ver cómo los policías y los guardias agredían a Fernando, cuando una elemento de la policía municipal la esposó. Explica que mientras él estaba tirado en el suelo, observó a los preventivos asfixiar a Fernando.
Mencionó que al levantarlo del suelo donde lo tenían sometido, se les cayó y escuchó un fuerte golpe; momentos después, Fernando empezó a convulsionar.
Hoy Gabriela se enteró de que todo comenzó porque su hijo intentó tomar una bandera del Santos Laguna para festejar y se originó todo el problema con los guardias.
Como se dio a conocer esta mañana, la muerte del hombre se suscitó afuera del bar tras una riña en la que participó el hijo de Gabriela y los guardias de seguridad del lugar.
De acuerdo a información proporcionada por autoridades de seguridad, las investigaciones preliminares señalan que los hechos sucedieron en el restaurante bar que se ubica entre Hidalgo y Victoria en la zona centro.
Fue alrededor de las 00:00 horas de este domingo, cuando el hoy fallecido se encontraba en compañía de Eduardo Daniel, de 30 años de edad y su esposa Gabriela, de 49 años, cuando Eduardo Daniel trató de tomar una bandera del Santos Laguna y personal de seguridad lo detuvo.
Durante la acción, comienza una riña con los guardias en la cual participan sus padres que fueron golpeados y el hombre se convulsionó hasta perder la vida.
Hoy Gabriela se enteró de que todo comenzó porque su hijo intentó tomar una bandera del Santos Laguna para festejar y se originó todo el problema con los guardias. (EL SIGLO DE TORREÓN)