El padre compró el chocolate sin fijarse bien en los ingredientes. (INTERNET)
Raffi Pownall, un niño británico de 11 años, falleció el 8 de junio pasado luego de comer cuatro trozos de chocolate ya que era alérgico a los lácteos.
Su padre le dio la golosina por error, creyendo que podía comerlo y que los ingredientes eran compatibles con la enfermedad de su hijo, sin embargo, aunque el chocolate no contenía gluten, sí llevaba leche en polvo, reporta la agencia Ruptly.
El niño fue trasladado al hospital, pero murió horas después por anafilaxis, una reacción alérgica.
Thomas Pownall, el padre, finalmente fue exculpado por las autoridades pues se determinó que "hizo todo lo que pudo" para salvar a su hijo y se concluyó que fue una ‘muerte accidental’.
DA.