A tres días de que los trabajadores del Sapal acudieron a reparar, nuevamente brotaron las aguas negras en la rúa de la vialidad. Durante un mes, a decir de los vecinos, habían esperado la reparación.
Tres días duró la reparación al drenaje hecha por trabajadores del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Lerdo (Sapal) en la avenida Coronado.
Como se informó oportunamente, esta vialidad, entre las calles Hidalgo y Guerrero fue cerrada el pasado 5 de marzo como medida precautoria, para que el personal del Sapal pudiera realizar las labores en la zona, afectando lo menos posible el flujo vial, para lo cual incluso se llevó maquinaria pesada.
El problema es que tras las maniobras ahí realizadas, por las que los vecinos esperaron un mes, nuevamente brotaron las aguas negras en la calle, afuera de la casa de Doña Rita Cázares, quien es una persona mayor que en varias ocasiones acudió a las oficinas del Sapal a reportar esta situación antes de que su reporte fuera atendido, según dijo, por instrucciones precisas de la alcaldesa, María Luisa González Achem.
Ayer, un grupo de vecinos nuevamente se quejaron ante esta casa editora porque el brote de aguas negras y pestilentes, que durante un mes llegaron a brotar de las alcantarillas y sanitarios de algunos de los hogares, regresó.
La señora Rosa María Ramírez Martínez, dijo que les preocupa que no dejaron bien la obra, pese a que se tardaron en atender el reporte.
Además señaló que Doña Rita realizó -a solicitud del personal del Sapal- un pago directo en ventanilla del organismo correspondiente a dicha reparación y que una parte la realizó en efectivo y le comentaron que la otra le llegaría incluida en el recibo.
Esta situación es la que personalmente ha provocado entre algunos vecinos mas molestia e incluso algunas suspicacias debido a que, según indican, se les cobró por un trabajo que se realiza desde abajo del cordón de la banqueta hacia la mitad de la calle por donde pasan los autos, por lo que tienen entendido que no se debió cobrar dinero a Doña Rita, puesto que el problema se generó en la tubería del drenaje que se ubica en la calle, afectando su propiedad y no al revés.
El Siglo de Torreón cuenta con fotografías que muestran que en efecto no fue necesario romper la banqueta, sino de la mitad de la calle hasta la base del cordón y también destaparon el registro de ese domicilio porque se encontraba colapsado debido al problema en la tubería ya descrito.
Por lo anterior, algunos de los vecinos acudieron al Sapal a exponer la situación, pero en ese momento no pudieron ser atendidos por el director, Gustavo Samaniego Holguín, debido a que se encontraba fuera del edificio atendiendo otro asunto propio de su encomienda puesto que, como ya se ha informado, el Sapal tiene dificultades para reunir el dinero que está cobrando la Comisión Federal de Electricidad por el suministro de energía en los pozo de agua potable de Lerdo.
Respecto al problema de brotes de aguas negras suscitado a tres días de que se hicieran las reparaciones, la Dirección del Sapal atenderá este asunto de forma personal.
Este viernes, el director del Sapal, Gustavo Samaniego Holguín, dijo que se entrevistará personalmente con los vecinos afectados por el brote de aguas negras a las 9 de la mañana, acudiendo directamente al lugar de la afectación y también dijo que lo que haya que aclararse en cuanto al tema del recurso que pagó la señora Rita Cázares en ventanilla de cajas receptoras, también se hará.
Ayer el director de Sapal se comunicó con una de las personas afectadas para concertar el encuentro y atender la queja.
