El pueblo, prácticamente, quedó solo al autoexiliarse la mayoría de las familias ante el temor de que los operativos de la Marina arrecien, y todo parece indicar que así será.
El cerco militar de la Secretaría de Marina que inicia en Cosalá y se concentra en este poblado de la sierra duranguense, orilló a sus habitantes a desplazarse a Sinaloa. Lo único que les dicen los marinos, detallan los habitantes, es que buscan "a un hombre que se hace acompañar de varios individuos".