Carlos Tévez (18) y otros jugadores argentinos tras finalizar el encuentro donde cayeron ante la selección de Ecuador. (EFE)
Ecuador consiguió esta noche un histórico triunfo al imponerse, de visitante, por 0-2 ante Argentina en el estadio Monumental de Buenos Aires, en la primera jornada de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial Rusia 2018.
Frickson Erazo y Felipe Caicedo firmaron los dos tantos que le permitieron al 'tricolor' sacar su primer triunfo en suelo argentino y apenas el quinto en 33 enfrentamientos entre ambos equipos.
Argentina mostró su imagen más pálida y sufrió la ausencia de su líder y capitán, Lionel Messi, que por lesión no pudo formar parte de este comienzo de camino para el Mundial de Rusia 2018.
Este resultado marcó la primera derrota oficial argentina en el estadio Monumental de Buenos Aires luego de 22 años, desde aquella recordada goleada por 0-5 que le propinó Colombia en la última jornada de las eliminatorias para el Mundial de Estados Unidos 1994.
Desde aquella fatídica jornada, la Albiceleste acumulaba 8.068 días invicto, con 30 triunfos y 10 empates oficiales, mientras que en amistosos la última caída había sido el 8 de noviembre de 1995 en el 0-1 ante Brasil.
Para Ecuador este triunfo supone un comienzo a pie firme en las eliminatorias en busca de su cuarta participación mundialista luego de Corea-Japón 2002, Alemania 2006 y Brasil 2014.
En el comienzo del choque, Ecuador encontró en la presión sobre la última línea local una fórmula que evitó la posesión cómoda del balón por parte del mediocampo argentino integrado por Javier Mascherano, Lucas Biglia y Javier Pastore.
Además la presencia de Jefferson Montero y Antonio Valencia por las bandas dejaba en evidencia la falta de rodaje como titulares de los laterales argentinos Emmanuel Mas y Facundo Roncaglia. A esta situación se sumó que Argentina perdió por lesión en el recto posterior de la pierna izquierda a Sergio Agüero, portador de la casaca número diez y abanderado ante la ausencia de Messi.
La salida de Agüero derivó en el ingreso de Carlos Tévez, un jugador pedido por el público, por la imprevista lesión del delantero del Manchester City.
Sin embargo, el circuito de juego tampoco funcionó para Argentina que no encontró en sus dos Ángeles, Di María y Correa, la posibilidad de generar peligro en el arco ecuatoriano.
Y las pocas veces que lo logró, el portero Alexander Domínguez respondió con solvencia como en un doble disparo de Correa y Agüero a los 17 minutos o en un tibio remate del propio Di María.
En el comienzo de la segunda etapa, Ecuador profundizó su ofensiva con Valencia como principal arma de ataque y con el recambio desde el banquillo con los ingresos de Segundo Castillo y Fidel Martínez.
Argentina fue mejorando su ofensiva hasta tener dos posibilidades claras, una en los pies de Mascherano y otra en un tiro de Di María, bien resueltas por Domínguez.
Y en el 81 llegó el golpe de Ecuador con un tiro de esquina que conectó Noboa en el primer palo y dejó a Erazo solo frente al arco para batir al portero Romero.
Poco permitió de reacción Ecuador porque ante un estadio Monumental impávido, generó el segundo tanto a los 82 con una llegada en profundidad de Antonio Valencia que con un preciso pase dejó a Felipe Caicedo para establecer el 0-2.
Argentina careció de reacción y lentamente pasaron los minutos restantes para que Ecuador consiguiera hacer historia en Buenos Aires y llevarse un triunfo tan inesperado como festejado.
Del otro lado, los jugadores albicelestes dejaron el campo bajo una lluvia de silbidos y sumergidos en una profunda confusión.
