Exhibición. El director de cine Gaspar Noé y los actores Aomi Muyock, Karl Glusman y Klara Kristin posan para los fotógrafos durante la presentación de la película Love en Cannes. (EFE)
Si de mostrar sexo se trata, Love lo tiene todo: felaciones, tríos sexuales, una eyaculación directa a la cámara, un falo que se dirige al espectador.
Todo en 3D. Tanta expectación causaba esta película porno del polémico director argentino Gaspar Noé (que con Irreversible demostró que lo suyo es la transgresión) que la proyección nocturna en el Gran Teatro Lumiére (la sala más importante del festival con casi 3 mil butacas) estuvo llena dejando fuera de la sala a más de 200 personas.
La segunda y tercera proyección del día; realizadas durante esta jornada tuvieron lleno total y dejaron a otros cientos de espectadores con las ganas y el morbo de ver aquellas escenas de las que no se deja de hablar en los pasillos del festival.
No es la primera vez que una película porno en 3D circula por Cannes. Hace tres años se habló mucho de una película china de la misma naturaleza que fue comprada por varios distribuidores pero que sólo se proyectó para compradores interesados en el Mercado del Festival.
En esta ocasión el certamen francés decidió darle a un filme de esta naturaleza una exposición brutal al proyectarla en la sala más importante del Festival. No era para menos, pues su creador es un cineasta de culto. Es algo que no ha ayudado a la reputación del filme al que la crítica ha calificado de inconsistente y banal. Cannes es un público bastante abierto.
En los últimos tiempos, películas como El Imperio de los sentidos, de Nagisa Oshima (1976) o la reciente ganadora de la Palma de Oro en 2013, La vida de Adéle, de Abdellatif Kechiche se encumbraron en el festival galo.
Sin embargo, Noé decepcionó a los espectadores que esperaban una trama mejor construida, con diálogos potentes y actuaciones de mayor nivel. De hecho, muchas de las personas presentes en la proyección abandonaron sus butacas después de una hora de ser sometidos a escenas de sexo mecánico y sin erotismo.
El director del polémico filme justificó su cinta en la conferencia de prensa diciendo que esta es una película con tintes autobiográficos y en la que el sexo es lo menos importante.
"Este filme surgió de la pregunta, '¿qué puedo hacer que me sorprenda?', tomé muchas fotos con cámaras en 3D y con una cámara que costó 500 euros. Y no, yo no tengo la impresión de que haya ninguna transgresión en la película, ni en mi vida ni en lo que amo del cine".
"Directores como Passolini o Buñuel han ido en esta dirección. Lo que hice fue filmar en 3D con una pequeña cámara", aseguró el cineasta, quien dijo que él lo único que quería era hacer un filme de amor.
Exhiben 41 cortometrajes mexicanos en el festival
Un total de 41 cortometrajes mexicanos participan este año en el Short Film Corner, la esquina del corto de la edición número 68 Festival Internacional de Cine de Cannes, desde la que buscan una salida a otros encuentros fílmicos, su venta o distribución en otros países.
La cifra es menor que en la edición del año anterior en la que participaron 57 cortometrajes mexicanos, confirmaron fuentes del certamen.
Las producciones participantes fueron seleccionadas por Cannes, inscritas o propuestas por festivales o por el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), entre alrededor de miles de cortos de todo el mundo.
Varios accedieron a la sección de Cannes por la que pululan cada día centenares de jóvenes cineastas noveles, a propuesta del Festival Internacional de Cine de Guanajuato (GIFF) que presenta este año un programa especial de siete cortos denominado Identidad y pertenencia.
La mayoría de los filmes mexicanos de la sección son dramas o documentales sociales, aunque también se exhiben, en pequeñas salas o en pantallas individuales, alguna comedia, cortos con temática del medio ambiente, e incluso un corto de animación.
El Short Film Corner es un espacio dedicado a la exhibición, venta y distribución de cortometrajes que forma parte del Marché du Film, el mercado de cine más importante del mundo.
Es una de las partes más animadas y frecuentadas por jóvenes del festival, que cuenta con un área especial en la zona baja del Palacio de Festivales, en la que se fomenta el encuentro entre jóvenes directores.
Aparte de la Esquina del Cortometraje, otros cuatro cortos mexicanos seleccionados por el Festival Internacional de Cine de Morelia se proyectaron en el marco de la Semana de la Crítica la sección paralela de Cannes, destinada al descubrimiento de nuevos talentos.
