Víctor Montagliani, presidente de Concacaf, dijo que la Liga de Naciones es un ‘nuevo comienzo’ en la confederación.
La Concacaf anunció la creación de la Liga de Naciones, un nuevo formato diseñado para que los países pequeños puedan participar en partidos más competitivos. Pero al mismo tiempo, presenta desafíos menos atractivos para potencias regionales tales como México y Estados Unidos.
La competencia anunciada ayer reemplaza las fechas de amistosos de la FIFA, un concepto similar al adoptado por la UEFA y que comenzará en Europa en septiembre.
Para México y Estados Unidos, el nuevo campeonato implica menos partidos de exhibición contra equipos europeos y sudamericanos, y más contra equipos de Centroamérica y el Caribe.
Esos partidos podrían ser menos atractivos para el público, y podrían llevar a los equipos europeos a negarse a dejar que sus jugadores viajen largas distancias para sumarse a sus respectivas selecciones.
LA Concacaf dijo que los seis equipos que participaron en la ronda final de las eliminatorias mundialistas del año pasado irán directamente a la fase de grupos de la Liga de Naciones: México, Estados Unidos, Costa Rica, Honduras, Panamá, y Trinidad y Tobago. Guatemala no participará porque está suspendida por la FIFA.
Los demás 41 miembros de la Concacaf fueron elegidos por sorteo para jugar en clasificatorios desde septiembre hasta marzo de 2019.
En base a su desempeño, cada equipo al avanzar irá a la liga A, B o C, y cada liga será aglutinada en grupos que jugará en formato “round robin” en partidos de la FIFA en septiembre, octubre y noviembre de 2019.
Los ganadores de la Liga A avanzarán a una ronda final en marzo de 2020 y los equipos en los últimos peldaños serán relegados a la Liga B, cuyos ganadores avanzarán. Los últimos de la Liga B serán relegados al Grupo C cuyos ganadores avanzarán.
La Liga A tendrá cuatro grupos de tres equipos, y la Liga B tendrá cuatro grupos de cuatro equipos. La Liga C tendrá cuatro grupos.
La Concacaf anunció también que los seis equipos en el hexagonal del año pasado y los mejores 10 equipos en las clasificatorias participarán en la Copa de Oro del año entrante, el campeonato bianual regional.
‘UN NUEVO COMIENZO’
El presidente de la Concacaf, Victor Montagliani, aseguró que la Liga de Naciones es un “nuevo comienzo”, una oportunidad para dejar atrás los años de descrédito por la corrupción que marcó a la confederación que ahora dirige.
“Hoy (ayer) es un día muy importante, histórico, porque por primera vez Concacaf está hablando de fútbol. Es el fin a un pasado muy difícil para la confederación”, dijo el canadiense en entrevista con Efe al margen de la nueva competición, que comenzará a disputarse en 2019.
“La Liga de Naciones es un nuevo comienzo, pero también un camino, no es el destino final, sino el comienzo y necesitamos trabajar cada día porque hay otros proyectos”, destacó.
