Al poner en marcha el Programa Frontera Sur, el presidente Enrique Peña Nieto advirtió que México está convencido de que el fenómeno migratorio debe ser atendido desde una perspectiva regional, corresponsable y humana.
"Pero también somos conscientes de que cada nación debe de hacer su parte", dijo. Subrayó que por ello ha dispuesto el reforzamiento de medidas para ordenar y dar mayor seguridad al complejo fenómeno migratorio.
Acompañado por el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, se manifestó a favor de lograr una frontera sur más segura, ordenada y porque la relación de México con Centroamérica contribuya al desarrollo de toda la región mesoamericana, idea fundamental para el desarrollo regional en los próximos años, en un deseo general.