OPORTO, PORTUGAL.- Las selecciones de Dinamarca y Suecia se clasificaron para los cuartos de final de la Eurocopa con el resultado temido por los italianos, un empate a dos que deja fuera a los "azzurri", que reclamaron los días previos al partido el "fair play" entre los dos conjuntos nórdicos.
Los dos técnicos, obviamente, descartaron la posibilidad de un acuerdo y la impresión fue que ambos conjuntos salieron desde un principio a por la victoria, pero la sombra sobre un supuesto pacto recaerá siempre sobre ellos.
Bajo una lluvia incesante, el estadio de Bessa XXI fue escenario de un duelo, no obstante, vibrante y emocionante.
El derby nórdico mantuvo la incertidumbre hasta el último instante, en el que Jonson marcó el tanto del definitivo empate a dos (89’), tras un tremendo error del portero danés Sorensen.
En ese momento, Italia empataba a uno con Bulgaria, por lo que el resultado de Bessa no le afectaba, pues su clasificación pasaba imperiosamente por una victoria ante los búlgaros. Pero el tanto de Antonio Cassano en el minuto 95 en Guimaraes devolvió la trascendencia al partido de Oporto y a un resultado que dará de qué hablar durante mucho tiempo.
Con el 2-2, Dinamarca y Suecia pasan a los cuartos e Italia se queda fuera de la forma más amarga, aunque seguro que elevarán su protesta a la UEFA.
Victoria nórdica
“Victoria nórdica, 2-2”. Eso rezaba una pancarta del público en la grada del Estadio Bessa XXI de Oporto. Con ese plano de la televisión se despedía la conexión del partido que disputaron Suecia y Dinamarca. Simbólico.
Necesitaban las dos selecciones un empate a dos goles para colarse a cuartos de final. Y eso pasó. ¿Pactaron? ¿Hubo acuerdo? Difícil respuesta y quizás algún día se sepa. Generalmente este tipo de historias salen años después en algún libro de memorias de los implicados.
En cualquier caso, desde la frialdad y viendo el encuentro sin pasión, no estaba claro que el tongo se produjera. Posiblemente Sorensen, el meta danés, habría podido hacer algo más en el 2-2 final de Jonson. Pero no está claro. Y fue una acción más de las muchas que pueden ocurrir en un terreno de juego. El empate pareció justo.
Seguro que en Italia se instaló anoche la sospecha. Sin embargo, Italia tampoco demostró nada especial en esta Eurocopa. Un gol de Cassano ante Bulgaria en el minuto 95 fue insuficiente para pasar a los cuartos de final. "Nos vamos con la cabeza bien alta", dijo Trappatoni nada más concluir el partido.
A estas alturas, da igual. Italia, como España, está fuera de la Eurocopa. Dos de las Ligas más fuertes del continente se encuentran en la calle. Eso sí, a Italia le sigue acompañando la fortuna. Si es obligatorio marcar, siempre llega su gol. Esta vez no dependían directamente de ellos. Y Cassano, con lágrimas en las ojos, no podía entender que ese gol del minuto 95 fuera un “gol basura”. Suecia está de moda en Portugal. Jonson, Ljunberg, Ibrahimovic, Larsson y compañía vuelven a poner a Suecia en el mapa del futbol.
