Antes de subir al avión, el delantero colombiano Carlos Darwin Internacional Francisco Sarabia de Torreón. El último que bajó del autobús en Montreal fue Oswaldo Sánchez, quien con todo, bufanda y guantes, saludó a la prensa reunida en el lugar, luego unirse a sus compañeros y cenar, tras la larga travesía.
Luego de 12 horas de viaje, Santos llega a Montreal.
Como son típicos los traslados de los Guerreros en la Liga de Campeones de la Concacaf, a los albiverdes les tomó más de 12 horas llegar hasta una de las ciudades más al norte de América.
Montreal los recibió con una temperatura de -9 grados centígrados, aunque con el aire registrado de más de 30 kilómetros, la sensación era de -14. Desde el domingo cayó una intensa nevada de varios centímetros de espesor, que tiene banquetas y calles del centro de la ciudad, cubiertas por una densa capa blanca de nieve y hielo. La delegación santista tuvo una demora en su conexión en la Ciudad de México, debido a que el aeropuerto capitalino, estuvo cerrado por una neblina que impedía el aterrizaje y salida de vuelos. Su arribo al Aeropuerto Internacional Pierre Elliott Trudeau de esta ciudad canadiense, estaba programado para las 19:50 horas locales (18:50 de Torreón), pero no fue sino pasadas las diez de la noche cuando arribaron.
Fuertemente abrigados y cubriéndose nariz y boca, los laguneros bajaron del autobús que los llevó a su hotel de concentración, ubicado en el Boulevard René-Lévesque. Observando impresionados, las neviscas realizadas por el aire que sopla con fuerza en el país de la hoja de Maple.
El primero en descender y sufrir casi un resbalón, fue el mandamás albiverde, Alejandro Irarragorri Gutiérrez, quien advirtió al resto del contingente, de la peligrosidad del piso llenó de hielo y agua, tras la tormenta de nieve que azotó el Sur de Canadá y el Norte de Estados Unidos.
Le siguió el técnico Daniel Guzmán, para que luego tocara turno a su cuerpo técnico, aunque su auxiliar Mauricio González, dio la orden de ingresar rápidamente al hotel y evitar respirar el aire gélido, que pudiera ocasionarle algún problema respiratorio. Christian Benítez bajó sonriente de la unidad, escuchando la canción "La Cita" de los Chicos de Barrio, mientras que su paisano Pedro Quiñónez, bajó admirando la linda postal, sobre todo de la Catedral Marie-Reine-du-Monde.
Matías Vuoso bajó en pescador y comentó rápidamente: "no hace tanto frío como dicen", aunque más bien el "Toro" estuvo resguardado y no caminó por un crucero, donde calan con intensidad las ráfagas de viento. Los albiverdes entrenarán ligeramente hoy en punto de las 13:00 horas (12:00 de Torreón) en el Estadio Olímpico, que sufrió un percance en su domo, debido a la gran cantidad de nieve acumulada.
Desde temprano inicia la travesía
Los Guerreros iniciaron su largo viaje a Montreal a las 7:30 horas de ayer. Una mañana un poco fría, pero no tan gélida como sería la noche en Montreal. Cada uno de los jugadores albiverdes fueron llegando al Aeropuerto Internacional Francisco Sarabia, algunos los dejaron algún familiar, otros compartieron el “aventón” y unos más, como Daniel Ludueña, llegaron en taxi. Ayer fue una despedida poco común, ya que los equipos deportivos de niños y niñas del Colegio Alemán coincidieron en la central aérea. Varios buscaron a los jugadores para pedirles el aútografo, el abrazo y hasta el beso. Niños, jóvenes, adultos y hasta un recién nacido se tomaron una foto con los jugadores.
Daniel Guzmán consideró que su equipo llegaba motivado al juego ante el Impact y para nada se confía de su rival. “Como no conocemos nada del rival, tenemos que estar bien alerta”. Oswaldo Sánchez comentó que no hay que confiarse del equipo canadiense. “Confiarse de qué, es un rival que no conocemos, que seguramente juega bien para llegar a esta instancia. Vamos llegando al nivel que el técnico espera y esperemos buen resultado”.
