Tratando de olvidar el reciente descalabro sufrido en el clásico del futbol español ante el Real Madrid, el Barcelona se convirtió en campeón de la primera edición de la Supercopa de Cataluña, tras vencer en penales al Espanyol.
Tras empatar 1-1 en los 90 minutos reglamentarios en el estadio de Montilivi, el campeón se decidió desde el punto de penal, en una serie que ganó el conjunto blaugrana 4-2.
El Barcelona se adelantó al minuto 15 en el marcador con un cabezazo de Gerard Pique. Los papeles se invirtieron en el complemento cuando el Espanyol adelantó líneas y después de varios disparos sin éxito, llegó la anotación de Anaitz Arbilla al minuto 50, al cobrar un tiro directo. Todo se decidió desde el punto penal, donde la suerte estuvo con los de Luis Enrique, ya que Xavi, Halilovic, Grimaldo y Rakitic acertaron sus disparos, mientras que Arbilla falló su tiro a la portería defendida por el joven guardameta Jordi Masip.
