El alcance global de los problemas de Oceanografía llegó a Holanda. La empresa también tiene procesos pendientes con empresas de Europa.
El segundo banco más grande de los Países Bajos, Rabobank Group, es uno de los acreedores más importantes de la empresa de Amado Yáñez, y corre el riesgo de no recuperar un monto superior al impacto que sufrió Banamex en sus utilidades por el fraude que se imputa a Oceanografía.
El banco holandés se suma así a la lista de instituciones que habrían sido defraudadas por la compañía de Yáñez: Banamex, Pemex, IMSS y la firma noruega Norsk Tillitsmann.
En septiembre pasado, cuando Oceanografía informó por última vez sobre su situación financiera, indicó que le debía 220 millones de euros o poco más de 4 mil millones de pesos a Rabobank Group, grupo financiero que por sus activos es casi once veces más grande que Banamex.
Este último tuvo que rebajar 3 mil 177 millones de pesos a sus utilidades de 2013 tras descubrir el fraude del que fue objeto por parte de Oceanografía.
Las dos líneas de crédito originales de Rabobank, por 236 millones de euros, fueron otorgadas en la década pasada a una filial de Oceanografía, Caballo Frión Arrendadora, y sirvieron para la compra de nueve barcos asignados para cumplir contratos con Pemex.
