La toma de la Fiscalía de Distrito por parte de militantes de la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ) CNPA, dejó un saldo de un segundo subcomandante de la Policía Ministerial muerto; un campesino y varios agentes y funcionarios cautivos en el interior del edificio.
A las 09:00 horas, decenas de campesinos arribaron al edificio de la Fiscalía de Distrito para exigir la destitución del fiscal Pablo Arturo Liévano Flores, ya que lo acusan de haber liberado órdenes de arresto y de presentación en contra de líderes y militantes de la OCEZ CNPA.
Pero a las 12:45 horas, los campesinos armados con mazas, barretas y varillas procedieron a derribar las puertas de las oficinas para tratar de capturar al fiscal, que no se encontraba en el lugar.
Al momento que los campesinos irrumpieron en el lugar, estos presuntamente intentaron desarmar a los policías y fue cuando uno de ellos disparó contra un manifestante que fue identificado como Carlos López Hernández.
Un reportero que permaneció retenido en el lugar por parte de los campesinos comentó, que el agente de la Policía Ministerial iba ser macheteado y fue cuando accionó sus armas.
Los campesinos entonces procedieron a desarmar a los policías y a golpearlos con piedras, palos y varillas.
Un subcomandante de la Policía Ministerial identificado sólo con el apellido de Altamirano recibió un machetazo y golpes, pero perdió la vida horas después como consecuencia de las heridas que recibió.
Varios agentes de la corporación se mantienen en las oficinas y los campesinos intentan rescatarlos para presuntamente lincharlos.
Un oficial permanece amarrado en la entrada del edificio de la Fiscalía de Distrito ubicado sobre la 6a Poniente Sur, en el barrio de Candelaria.
Los campesinos liderados por Madaí Roblero echó a los reporteros de lugar y amenazó con que "no publiquen nada", porque "ya los conozco".
