Economía. Con los aumentos que se han venido presentado en la canasta básicam, la gente gasta lo mismo pero compra menos.
Nadia avila / El Siglo de Durango
En lo que va del presente mes, los precios de varios productos de la canasta básica han alcanzado un aumento general del 15 por ciento y no se ve que en lo que queda del año pudiera estabilizarse esta alza de precios.
La inflación que se ha dado a conocer a nivel nacional alcanza el 4.73 por ciento, sin embargo, ese porcentaje se queda muy abajo de los costos reales que el consumidor tiene que pagar, de acuerdo a la evaluación de los expendedores.
David Veloz Gutiérrez, presidente de los comerciantes del mercado de abastos El Refugio, dijo que algunos productos de la canasta básica han alcanzado hasta el 100 por ciento de aumento.
Esta ola de incrementos está encabezada por el huevo que pasó de 17 pesos hasta los 40 ó más, aunque esta semana se ha estabilizado a 24 pesos por kilo.
Otro producto que alcanzó precios altos fue el de la harina de trigo que en lo que va de este mes logró llegar al 50 por ciento. El atún alcanzó el 12 por ciento.
Con un aumento en septiembre del seis al ocho por ciento están los aceites, la harina de maíz y el azúcar, pero con estas alzas del aceite y del huevo, la mayonesa también sufrió un aumento del 20 por ciento en septiembre.
Sin embargo, algunos de estos productos suelen tener una alza normal para el último trimestre del año, pero ahora los incrementos se han adelantado por lo que no se prevé una estabilización de precios en los meses venideros.
LA CANASTA BÁSICA ES YA UN LUJO
Explica Veloz Gutiérrez que el consumidor ahora tiene menos poder adquisitivo porque su sueldo sigue siendo el mismo, "si antes se llevaba un kilo de azúcar, hoy sólo un cuarto, igual con la harina de maíz o bien, busca otras opciones, pero la canasta básica ha dejado de serlo, ya no es costeable, ahora es un lujo", comenta.
Señala que si los consumidores han perdido poder de compra, ellos como comerciantes también han sufrido las consecuencias porque los productos que adquieren ahora son más caros, pero la gente gasta lo mismo o hasta menos.
Incluso, comenta que de aprobarse las reformas laborales, el obrero será el mayor perjudicado, y si éste sector se afecta, también las "tienditas" que, a su vez, son los clientes de los mercados de abastos.
