Hay en la antigua casa de Saltillo donde está Radio Concierto, casa que mis paisanos ven como museo, un cuadro al óleo con la estampa de San Juan de Dios.
Es tenebrista la pintura. El rostro ascético del santo es la única luz en la negrura de la tela. Pero tiene una intensa nota de color: en su mano derecha muestra el santo una granada de color de púrpura. Parece el fruto abierto una llamarada de rubíes.
Busqué en una hagiografía, y encontré que la granada es el símbolo de San Juan de Dios. Él amaba con especial dilección a Granada, y fundó en esa bellísima ciudad su Orden de los Hospitalarios.
El corazón enamorado se abre también como una roja llama, y es una luz en medio de las negruras de la vida.
¡Hasta mañana!...