HABILIDADES EN LA COMUNICACIÓN
Muchas personas tienen dificultades para encontrar qué decir en las conversaciones triviales, especialmente cuando se sienten inquietas o inseguras. Esto las impulsa, algunas veces a limitar su participación o por el contrario tratan de prolongarla demasiado. Estas conductas causan una impresión negativa.
Las siguientes sugerencias ayudarán a mejorar nuestra comunicación y con ello podremos actuar con propiedad y naturalidad en situaciones del diario vivir:
Aunque el iniciar una conversación puede parecer difícil, con la práctica llega a ser parte de la cotidianidad. Hay que aprovechar las oportunidades cuando se presenten: en lugares públicos, en el trabajo o en reuniones sociales.
Las conversaciones casuales usualmente se inician con un comentario o un tópico impersonal, especialmente cuando las personas no se conocen: una opinión sobre el clima, el tráfico, un cumplido, etc.; entre más cercana sea la relación, los temas personales resultan oportunos. Si se hace una pregunta hay que hacerla de tal manera que no sea contestada con un simple sí o un no, sino que ésta requiera de una respuesta más detallada.
Las personas tímidas, generalmente evitan hablar de sí mismas, más bien enfocan la conversación en la persona haciéndole algunas preguntas. Lo más conveniente es que la conversación fluya en ambas direcciones.
APRENDIENDO A ESCUCHAR
Para mejorar las habilidades de comunicación se requiere no únicamente la destreza para intercambiar información, sino también saber escuchar a otros. Sin embargo, la impaciencia dificulta el poner atención al mensaje que la persona trata de comunicarnos. Permítele a tu interlocutor que se convenza de que lo estás escuchando; por medio del contacto de ojos, cuestionando algo de lo que te está diciendo o pidiéndole alguna explicación si es necesario.
No es incorrecto, sino más bien necesario, disculparse cuando se comete algún error tampoco es descortés pedir ocasionalmente alguna aprobación; sin embargo, si estas estrategias se exageran, pueden tener un impacto negativo.
Generalmente, las conversaciones ocasionales tienen corta duración. Hay muchas maneras de dar por terminada una charla informal. No es una falla personal el hacerlo; esto es parte del ciclo de toda conversación.
Para mejorar la comunicación trata de ser más flexible al conversar. Aventúrate un poco más en tus riesgos sociales. Si una táctica en particular te da buenos resultados, procura usarla más.
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