Shira afirma que gladiadores improvisados hacen daño al espectáculo.
TORREÓN, COAH.- Carolina de la Rosa Juárez se sintió atraída desde muy pequeña por la lucha libre, a la que ingresó a temprana edad. Hoy en día goza de un buen cartel y ha alcanzado cierta estabilidad en el medio, gracias a su dedicación y perseverancia a lo largo de los años que lleva dentro de esta profesión, donde ha dado vida a personajes como Shira y Guerrera Azteca, con los que ha buscado dignificar la imagen de la mujer, además de darle un sitio equitativo en un mundo que por siempre se ha considerado propio para el dominio del hombre.
Madre de José Luis, un pequeño de seis años, que se ha convertido en la razón de vivir y luchar día a día para Shira o Guerrera Azteca, afirma tener la fuerza suficiente para superar cuanto reto encuentre en su camino, todo con el único fin de triunfar y sacar adelante a los suyos.
“Como todo en la vida, la lucha libre es difícil, de hecho nada es fácil, pero si te gusta, la haces. Entré por curiosidad, pero al final le tomé el gusto; entrenaba mucho las llaves, las caídas y en sí, todo lo que me ayudara a tener una buena formación, tenía mi meta bien cimentada, quería ser luchadora profesional y sabía que tendría que trabajar mucho para alcanzar mis objetivos”.
El acercamiento de Carolina a este deporte fue como suele ocurrir, por mera afición. Como aficionada acudía al Auditorio Municipal, la Plaza de Toros Torreón y el Palacio de los Deportes, en donde los domingos se realizaban carteles de lucha libre y se vivía un buen ambiente. Su natural curiosidad hizo que investigara sobre la forma de ingresar al medio y así fue a dar a la Arena Olímpico Laguna.
A los 13 años de edad inició sus entrenamientos, para lo cual fue fundamental el apoyo de su familia, el cual hasta hoy tiene en forma irrestricta. Para convertirse en luchadora profesional cumplió con un fuerte proceso de entrenamiento en el gimnasio, donde aprendió de su maestro, Reynaldo Treviño, las técnicas de este deporte y después de dos años, logra presentarse como profesional.
“Además de los costalazos y de que me pongan mis ‘buenas arrastradas’, me gusta el público, el ambiente de las arenas y desde luego los niños que van a la lucha libre, por lo general son quienes más me buscan, me siguen, no importa el lugar en que me presente”.
Se siente bien preparada
“Es difícil enfrentar a un hombre, nos supera en todo sobre un ring. No me rajo y procuro adaptarme a las circunstancias, los riesgos son muchos, un mal golpe o una mala caída, pero me siento bien preparada, he enfrentado a hombres, exóticos y mujeres, por eso estoy en un buen momento de mi carrera, pero conciente de que es apenas el principio, aún hay mucho que aprender de esta profesión.
He crecido, he madurado mucho, lo que me ayudó a estar en la AAA y en muchas arenas de provincia y la ciudad de México. En mi carrera he aprendido también algunas mañas, domino el estilo rudo y técnico, por eso no temo a ningún rival”.
En cuanto a piques y rivalidades, Shira dice que la regiomontana Tiffany ha sido una de las contrincantes que más le ha significado problemas en su camino en los últimos meses, y como muestra está el haber sostenido, en Durango, una lucha en súper libre en jaula, en un choque donde el público salió satisfecho por el rendimiento de ambas.
“En este momento no he conocido a ninguna rival que me impresione, creo que por ahora no hay luchadora superior a mí”.
Carolina afirma sentir respeto por todos sus compañeros de profesión, sea cual sea el bando al que pertenezcan, pero deja en claro: “Me admiro a mí misma porque hasta ahora he llegado al lugar que he querido, sé que aún me falta mucho camino por recorrer, quiero destacar internacionalmente y de ser posible, llegar a Japón, estoy segura de lograrlo, no llevo prisa, pero sé que tarde o temprano lo voy a conseguir”.
Admira también a su maestro, Reynaldo Treviño (Indio Chirikawa I) y a Blue Panther, por su trayectoria y metas alcanzadas, cree que ambos lograron lo que se han propuesto, cada uno en su estilo muy personal y de acuerdo a su propio carácter.
Tras haber recorrido una buena cantidad de arenas en el territorio nacional, Shira desea ahora una oportunidad para visitar Japón, país del cual tiene buenas referencias en cuanto al aspecto luchístico, por lo que desea tener la opción de comprobarlo, además de lograr un mayor crecimiento y desarrollo como gladiadora.
“En México hay buenas luchadoras y creo que podemos medirnos a cualquiera del mundo, pero en forma especial, considero que las japonesas son algo diferente, por ello mi deseo de visitar ese país”.
Fuera de los encordados he sabido madurar, he luchado contra todo por salir adelante; soy ama de casa, madre y esposa, pero ante todo una mujer que busca alcanzar sus metas, que busca la unidad de su familia y la superación diaria, tanto en lo profesional, como en lo personal.
La violencia contra la mujer
Al referirse la violencia contra la mujer, un fenómeno que cada vez crece más y que suele dañar a este sector de la sociedad, calificó el problema como una vergüenza, ya que el abuso por parte de los hombres es muy evidente, al dejar daños físicos y morales muy difíciles de superar, no únicamente en la mujer, sino en los hijos, los ancianos y otros miembros del núcleo familiar.
Carolina considera que este problema viene por la mentalidad machista que existe en muchos de los varones, lo que se ha acrecentado ante el fácil acceso que se tiene al alcohol y las drogas.
Invita a las mujeres que sufren de violencia, a levantar la voz, a no quedarse calladas. “Muchas prefieren mantener la boca cerrada ante las amenazas de su pareja, pero es un error, lo más sano es denunciar ante la autoridad esta clase de abusos”.
Shira señala que el miedo es el principal obstáculo para liberarse de este problema, muchas temen quedarse solas, no tener más a su pareja o el sustento que suele representar para la familia y prefieren callar.
“Los traumas que deja la violencia son muchos, la principal forma de superarlos es con terapia profesional. Los golpes en el cuerpo suelen desaparecer con el tiempo, pero la huella moral que dejan, es muy difícil de borrar”.
A pesar de que ella como mujer experimentó de alguna forma la violencia en carne propia, dice haber superado el problema a base de terapia, no sin antes pasar momentos difíciles debido al daño moral sufrido.
Sobre las repercusiones de la violencia contra la mujer, en La Laguna, dijo que es muy alta, aunque reconoció que existen otras partes donde el problema es mucho más grave y como ejemplo citó Ciudad Juárez, Chihuahua, en donde mentes asesinas han hecho de las suyas impunemente, sin que las autoridades hayan podido detener a los culpables.
“Creo que nada han hecho al respecto y eso provoca desconfianza en quienes tienen la obligación de aclarar los crímenes. En lo personal considero que detrás de toda esta cadena de asesinatos en contra de mujeres hay narcotráfico y mentes enfermas, sobre las que se debe aplicar todo el peso de la Ley”.
Luchadores al vapor, sí los hay
En el ambiente de la lucha libre, mucho se ha criticado en los últimos años el hecho de que un buen número de gladiadores se hagan al vapor, sin pasar antes por la mínima prueba de aptitudes sobre el encordado, por lo que el nivel del pancracio se devalúa y es de lo más común ver espectáculos denigrantes en las arenas citadinas.
“Es una vergüenza, un domingo vas a la lucha libre y ves al compañero hacer su trabajo, a la siguiente semana asistes al mismo escenario y ya se juega la cabellera sobre el ring, todo sin antes llevar un proceso de preparación en el gimnasio. Somos un buen número de elementos quienes nos partimos el alma en los entrenamientos, primero durante varios años en busca de alcanzar una buena preparación y recibir la oportunidad de luchar profesionalmente, y después para mantenernos en forma y actualizados en las técnicas de la lucha libre, mientras que otros simplemente llegan. Es una vergüenza que los promotores se presten a este tipo de situaciones”.
Otro de los aspectos sobre los que esta luchadora puso énfasis, se refiere al grado de protagonismo que han alcanzado los réferis en los últimos tiempos, elementos que por siempre fueron considerados como la máxima autoridad sobre el ring, pero ahora llegan a ser más importantes que los propios gladiadores, por lo que han convertido a la lucha libre en un auténtico espectáculo.
“Lejos de ser jueces, hoy son los artistas del ring, ya que igual imparten justicia o demuestran abiertamente su preferencia por tal o cual bando, apuestan sus cabelleras, son seconds de determinados elementos o definitivamente se convierten en luchadores. Ya son más que uno en el cuadrilátero”.
Para Carolina los promotores deben ser más serios y profesionales al respecto, y lo mismo debe ocurrir con la Comisión de Lucha Libre, ya que al tratarse de un deporte, se le debe dar la seriedad requerida por parte de todos los involucrados.
Sin licencia no se puede exigir
Uno de los grandes problemas en el pancracio lagunero desde hace años, se refiere a la gran cantidad de gladiadores que ejercen su trabajo en los diferentes escenarios destinados a promover la lucha libre, sin contar con su respectiva licencia, lo que ha generado todo tipo de irregularidades, ante la complacencia, desinterés y tal vez hasta la conveniencia de quienes en su momento han estado al frente de la Comisión de Lucha Libre.
“La gran mayoría de los luchadores son gente floja, con el pretexto de la falta de tiempo y exceso de trabajo, prefieren pagar multas todo el año, pero no invertir un poco de su tiempo en efectuar su trámite en las oficinas de la Comisión de Lucha Libre.
Hay quienes exigen mucho, pero no pagan su licencia, para tener derecho a exigir, primero debemos cumplir con nuestra obligación, si no, es mejor quedarse callado”.
