A menos de tres semanas de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) decida la validez de la elección para gobernador de Durango, los dirigentes del PAN y PRD se reunieron ayer con magistrados para insistir en que el triunfo del PRI debe anularse.
El líder del PAN, César Nava, dijo que la elección del 4 de julio en Durango fue "la más violenta del país" al señalar intervención de la delincuencia organizada.
Nava acusó al gobernador Ismael Hernández Deras de hacer "una campaña paralela" con la entrega de dinero y apoyos a favor del PRI.
Nava fue acompañado por los dirigentes del PRD; Jesús Ortega, y de Convergencia, Luis Walton.
El priista Jorge Herrera Caldera, fue declarado gobernador electo por el Instituto Electoral de Durango y el Tribunal Estatal lo validó, por lo la coalición impugnó la elección ante el TEPJF.
El Tribunal deberá decidir si la elección es válida o si se anula antes del 15 de septiembre, cuando Hernández Deras termina su mandato.
El ex candidato José Rosas Aispuro, también acudió a la reunión con los magistrados y dijo que está listo para enfrentar la demanda por difamación que puso Hernández Deras en su contra.
