Trabajan. Se colocan ya límites alrededor de la Presidencia para evitar riesgos a ciudadanos durante la demolición del edificio.
El comercio formal ubicado en las calles aledañas al edificio de la Presidencia Municipal, que próximamente será derrumbado, tiene una baja en sus ventas de 50 por ciento según afirman propietarios y encargados de negocios.
Son 15 comerciantes quienes tienen sus negocios, principalmente en la calle Ramón Corona y entre las avenidas Allende y Morelos quienes solicitan el apoyo del Gobierno del Estado y de la Presidencia, pues aseguran que no están en contra del proyecto de la "Gran Plaza" pero que el proceso constructivo que se llevará les está afectando mucho económicamente.
La cantina, la tortillería, neverías, tiendas de celulares y eléctricos, tienda de renta de smoking, mini súper y además el comercio informal, principalmente quienes venden "gorditas", son los más afectados en sus ingresos.
"Nosotros hicimos una petición de apoyo para el Estado, estamos unidos los comerciantes desde la Allende hasta la Morelos porque este desastre -porque ahorita es un desastre aunque después pueda ser algo benéfico- ha ocasionado que las ventas bajen en un 50 por ciento", explica José Hernández, propietario de uno de estos negocios cuya mayoría tiene más de 20 años, algunos incluso el mismo tiempo que tenía el edificio municipal.
Los afectados reconocen que legalmente no existe nada que obligue a las autoridades a apoyarlos económicamente por sus afectaciones a raíz de la decisión de la demolición de la Presidencia, sin embargo apelan a la voluntad política del Gobierno del Estado, pues la mayoría son pequeñas y medianas empresas que han luchado por subsistir durante años.
"Nosotros esperamos que el lunes o el martes puedan atendernos las autoridades, hasta ahorita no nos han atendido, pero nosotros estamos interesados en tener un diálogo", acotó don José.
15
NEGOCIOS
Formales están teniendo una disminución de ventas del 50%
