Arranca. Disfrutan los jóvenes del primer ensayo de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Torreón bajo la batuta de Natalia Riazanova. EL SIGLO DE TORREÓN / FERNANDO COMPEÁN
Notablemente emocionados los más de 60 jóvenes integrantes de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Torreón, se dieron cita ayer en la Facultad de Contaduría de la Universidad Autónoma de Coahuila para su primer día de ensayo.
Con la emoción de la primera cita, la gran mayoría llegó antes de la hora acordada, 10:00 de la mañana, los estuches de violines, chelos, flautas y demás instrumentos, particularmente lucían pulcros, sus propietarios les habían sacado brillo porque ahora hacen parte una orquesta.
Antes de que se asomara la batuta de la directora Natalia Riazanova, la maestra les dio la bienvenida al proyecto, les aumentó la adrenalina con una invitación a la música, la cultura y el significado que la orquesta deberá tener para la región.
Mientras adentro los jóvenes atendían las instrucciones de la directora, afuera los padres de familia y acompañantes de algunos pequeños, se mostraban más atentos que los propios músicos, todos querían acercarse a la directora para darle las gracias por el proyecto.
Cuando iniciaron las primeras notas a irrumpir la cotidiana tranquilidad del auditorio universitario, algunos estudiantes que pasaban desprevenidos por el lugar, asomaban con gesto de interrogante ¿quiénes son?, ¿de dónde vienen?, ¿van a tocar? Se preguntaban mientras se detenían unos minutos a observar a la directora impartiendo instrucciones.
"La verdad estoy muy sorprendida porque este ensayo fue muy leve, hicimos unos pequeños ejercicios nada más, pero no me imaginé que el nivel del colectivo en general fuera a tener tanta calidad", comentó la maestra Riazanova.
Más de dos hora duró el primer ensayo de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Torreón, un proyecto que en seis meses estará sonando.
