ROMA, (Reuters) - La pasta y los helados pueden ser deliciosos, pero están provocando un importante efecto secundario: los niños italianos son los más gordos de Europa, seguidos de cerca por los españoles.
Los datos de una conferencia sobre obesidad celebrada en Milán esta semana mostraron que más de un tercio de los niños italianos tienen sobrepeso.
"El aumento del sobrepeso y la franca obesidad que afectan a los niños se han incrementado de forma notable en Italia -la peor de Europa- con una prevalencia que alcanza el 36 por ciento en algunos estudios", reveló el informe de los Grupos Internacionales de Tareas contra la Obesidad (IOTF, por sus siglas en inglés).
Tras los niños italianos se sitúan los niños españoles, con un 27 por ciento de ellos por encima del pdeal.
David Porter, portavoz de dietética y salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijo que era fácil culpar a las cadenas de comida rápida que se están extendiendo, pero que el incremento se debe al consumo excesivo de comidas ricas en grasas saturadas, sal y azúcar.
"Las personas no generan el grado de energía para lidiar con esa concentración de alimentos con tan alto contenido energético.
Es necesario correr una maratón al día para quemar las calorías de un bocadillo que la mayoría puede comer en unos diez minutos", dijo el viernes Porter.
El pasado miércoles los primeros datos de la Encuesta Nacional de Salud dados a conocer por el Ministerio de Salud español revelaban la franca obesidad, el sobrepeso y el sedentarismo como problemas graves en la salud de los españoles.
La ministra de Salud, Ana Pastor, manifestó su preocupación por el número de niños que estaban afectados por este problema.
