Fue minutos después de las 2:00 de la mañana de ayer cuando atacaron a la PGJE.
Estalla una granada en el estacionamiento de la corporación durante la madrugada de ayer.
Minutos después de las 2:00 de la mañana de ayer por lo menos dos sujetos armados lanzaron una granada a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado, misma que explotó en el estacionamiento provocando lesiones en uno de los agentes a quien le penetraron varias esquirlas; el resto del personal de guardia repelió la agresión y balaceó el carro de los agresores pero alcanzaron a darse a la fuga a pie.
El procurador estatal, Daniel García Leal, informó que se aseguró el vehículo en el que iban los delincuentes y ahí encontraron tres armas de fuego, tres chalecos antibalas y alrededor de 180 cartuchos útiles calibre .9 milímetros y 7.62, de los que disparan los fusiles AK-47, mejor conocidos como “cuerno de chivo”.
Detalle a detalle. Eran las 2:00 de la mañana, ya habían cambiado de turno los agentes designados al resguardo de la corporación por lo que unos se fueron a dormir un rato y otros se quedaron alertas en las dos puertas de la Procuraduría –una que se ubica a unos metros de la carretera a Torreón que es usada para el público en general y la otra que está al fondo del inmueble por donde entra el personal-, pasaron diez minutos cuando se escuchó una fuerte detonación.
Los que se habían dormido y que cambiarían turno hasta las 4:00 de la mañana salieron de inmediato y vieron a uno de sus compañeros que entre el polvo y el humo hacía disparos a un vehículo tipo Escort de color guinda que acababa de arrancar –en el que iban los delincuentes-.
Pronto los demás agentes, quienes recordaron que el domingo pasado ya los habían amenazado, salieron también a repeler la agresión provocando que el vehículo si dirigiera rumbo a la puerta del personal donde los otros guardias ya los esperaban a balazos.
Los “topetearon” los guardias. El auto de los malandros, mismo que traía placas del estado de Coahuila, perdió el control y se impactó contra un poste obligando a los tripulantes a salir corriendo rumbo al fraccionamiento Villas del Guadiana, dejando sus armas en el vehículo.
De inmediato se activó el código rojo para que personal de todas las corporaciones acudiera al apoyo y para que una ambulancia se trasladara al lugar del ataque para que atendiera al agente lesionado, a quien se le apreciaron en la espalda y una pierna cuatro heridas producidas por las esquirlas que expulsó el artefacto explosivo.
Personal de la Policía Federal, de la Estatal Preventiva, de la Municipal y del Ejército Mexicano se constituyeron en la PGJE y apoyaron en los recorridos que hacían los agentes de la DEI en los fraccionamientos aledaños a la institución.
Turnan el caso a la PGR. Después de unos minutos por los radios de la corporación se escuchó que había un detenido, sin embargo, cuando pidieron datos sobre la ubicación ya no se confirmó, así mismo se reportó el aseguramiento de una camioneta pero al parecer aún no encontraban relación con los delincuentes que atacaron a la Procuraduría.
El personal de la institución siniestrada dejó el peritaje a los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pues de acuerdo a lo declarado por el Procurador por el uso de artefactos explosivos automáticamente compete la investigación a las Fuerzas Federales.
Asimismo, las primeras evidencias levantadas serían turnadas a la Procuraduría General de la República (PGR) para que el Agente del Ministerio Público de la Federación se encargue de integrar la averiguación previa correspondiente.
Todos los apoyaron. Mientras los policías de todas las corporaciones recorrían la zona para ver si encontraban a los delincuentes un grupo de soldados se trasladó a las cercanías de la Dirección Municipal de Seguridad Pública donde al parecer hacían guardia por si los delincuentes decidían atacar también a la Policía Municipal siendo minutos antes de las 7:00 de la mañana cuando se retiraron.
Aunque la investigación se dejaría en manos de la Federación, los agentes del Ministerio Público del fuero común informaron sobre el aseguramiento del vehículo Ford, de la línea Escort, color guinda con placas de circulación del estado de Coahuila, mismo que presentaba por lo menos nueve impactos de balas.
En el interior de la unidad estaban dos pistolas calibre .9 milímetros marca Pietro Beretta y Glock; tres chalecos blindados, siete cargadores para fusiles AK-47, 180 casquillos útiles y en la cajuela estaba un “cuerno de chivo”.
Son vulnerables ante los delincuentes
Durango. Daniel García Leal aceptó que en estos momentos todas las corporaciones policiacas se encuentran en el filo de la navaja y que debido a la problemática que se está viviendo en todo el país se registran estos ataques.
Aceptó que las instituciones de seguridad y de procuración de justicia son vulnerables ante cualquier tipo de delincuencia pero que estos actos son de competencia federal por la forma en que se dan y por el tipo de armamento que usan, por lo que turnarán a la PGR el avance y que en conjunto con el Ejército Mexicano llevarán a cabo el peritaje.
Reforzarán medidas de seguridad
Ante el ataque que sufrió la Procuraduría General de Justicia, su titular informó que ya se están tomando medidas de seguridad, que se colocarán algunas torres de vigilancia y se colocarán cámaras de videovigilancia con tecnología de punta, además de que ya se está levantando la pared perimetral, aunque esto resulta contraproducente, según lo comentado por algunos agentes, ya que la barda les obstruye la visibilidad de los carros que se acercan provenientes de la carretera y sólo los detectarían cuando ya los tienen enfrente.
