El crudo mexicano se vio impulsado por la volatilidad internacional.
La cotización de la mezcla mexicana de crudo de exportación reinició su comportamiento ascendente al alcanzar el pasado viernes un récord de 116.92 dólares el barril, en respuesta al comportamiento de los crudos de referencia en el mercado internacional, Desde el pasado 21 de mayo, fecha en que reportó un nuevo máximo de 112.06 dólares el tonel, el crudo mexicano había mantenido un comportamiento estable con descensos de hasta 3.17 dólares e incrementos moderados de 1.23 dólares.
Sin embargo, desde el pasado jueves, el precio del llamado "oro negro" se vio reactivado al reportar un incremento de 4.35 dólares con respecto a la jornada previa, motivado por el alza de 5.49 dólares del West Texas Intermediate (WTI).
El precio del crudo de referencia se disparó ese día hasta los 127.79 dólares, luego de las declaraciones del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, quien expuso que en vista del nivel récord inflacionario que se registra en la zona euro no se podía descartar un alza en las tasas de interés.
Lo anterior propició un incremento en la demanda de crudo a nivel internacional, toda vez que cuando suben las tasas de interés en la Unión Europea el dólar suele debilitarse frente al euro, lo que provoca que los inversionistas dirijan su interés hacia el mercado energético, al que consideran más seguro.
Luego, el pasado viernes, los petroprecios se dispararon con alzas de hasta 10.75 dólares, en el caso del WTI, ante las proyecciones de que el precio del hidrocarburo podría alcanzar los 150 dólares por barril y de un debilitamiento del dólar frente al euro, que ese 6 junio se cotizó en 1.56 dólares por divisa.
En el caso de la mezcla mexicana, el incremento fue de 8.84 dólares el barril, el más importante en la historia del petróleo mexicano de exportación, cuyo precio ha reportado cifras históricas en 28 ocasiones este año a 22 días de terminar la primera mitad de 2008.
De acuerdo con estimaciones de analistas, la mezcla conformada por los crudos Olmeca, Istmo y Maya podría alcanzar un máximo de 129 dólares en 2008.
Mientras tanto, de acuerdo con el reporte "Evolución del mercado petrolero", Petróleos Mexicanos (Pemex) estima que en junio el precio promedio de la mezcla mexicana se ubique en 106.98 dólares por barril, 78.3 por ciento mayor al de junio de 2007 y 1.6 por ciento superior al de mayo pasado.
El volumen de exportación de petróleo mexicano programado para junio es de un millón 500 mil barriles diarios, menor en 13.6 por ciento al observado en junio de 2007 y en 3.0 por ciento al registrado en mayo pasado.
Equilibrio financierosostiene subsidios
Los subsidios en combustibles y alimentos por parte del Gobierno Federal, que buscan mitigar los impactos inflacionarios del exterior, son sostenibles gracias al equilibrio financiero del país, aseguró el analista Carlos Núñez.
El director de Promoción Bursátil de Monex dijo que contar con finanzas públicas sanas en México permite canalizar recursos hacia las áreas más necesitadas o que requieren mayor atención, sin embargo este programa "no es la solución" al problema.
"Estamos expuestos a las turbulencias internacionales como todos los países, pero hay un equilibrio en las finanzas públicas de México derivado de la Ley de ISSSTE, la reforma fiscal, todos estos elementos están contribuyendo a que tengamos un equilibrio financiero en esta crisis que se vive de forma global".
El experto financiero subrayó que la situación de los alimentos en el mundo no se trata de una mera cuestión de precios, sino de desabasto que deriva en un encarecimiento de los productos. En este sentido, aclaró, el programa de subsidios del gobierno mexicano es de gran ayuda porque está orientado a enfrentar de mejor manera posible los choques de precios a nivel internacional, pero "definitivamente no es la solución".
Consideró que según se comporte la propia económica local se verá el rumbo del país, y refirió que hay una serie de estímulos a la producción de alimentos y una vez que las cosechas se den, los apoyos tendrán que reducirse y canalizarse a otros rubros.
"Tendrá que haber un equilibrio en la asignación; cuando la aplicación de estos primeros recursos empiece a dar sus frutos podrían destinarse a otros rubros que permita ir equilibrando la balanza para no estar permanentemente con esto", explicó.
Sobre la relevancia de contar en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) con un futuro sobre granos ante el alza de precios de los alimentos, consideró que ello puede dar una referencia clara y transparente en las expectativas de los precios.
Sin embargo, reiteró, "aunque hoy tuviéramos un mercado de futuros ya operando no cambiaría en nada la situación de los precios" porque lo que se vive es un déficit en la producción de alimentos a nivel mundial y no un incremento repentino o especulativo.
