En los albergues del DIF se les proporcionan todos los cuidados que requieren para su buen desarrollo, además del apoyo psicológico para superar cualquier trauma derivado del trato que recibieron de sus padres.
TORREÓN, COAH.- Un total de 53 menores de edad, permanecen en los albergues del DIF de Torreón porque sus padres no cumplen con sus funciones. Un 70 por ciento de estos casos se refiere a omisión de cuidados, que es la principal causa de que los pequeños permanezcan en Casa Cuna y Casa Hogar, aseguró Adelaida Martínez, directora del programa de Fortalecimiento de la Familia.
Casa Cuna trabaja como un albergue para niños que, por omisión de cuidados, fueron retirados de sus viviendas, así como por maltrato físico, entre otros. En la actualidad, hay 24 menores que van desde recién nacidos hasta los seis años.
Después de esa edad, pasan a Casa Hogar, en donde hay 19 niñas y 10 niños. “El mayor porcentaje de los pequeños que tenemos en los albergues del DIF es por omisión de cuidados, y un número menor por maltrato físico, hablamos de un siete por ciento”.
De acuerdo a la directora, los niños están en estos albergues porque sus padres no se hacen cargo de ellos, “no los cuidan y esto ocasiona que los pequeños tengan accidentes, estén desnutridos o padezcan enfermedades”.
Por esa razón, dijo, muchos niños trabajan o se la pasan en la calle con el riesgo de que los pueda atropellar un vehículo, o sufrir otro tipo de accidentes. “A nuestros albergues llegan por medio de la Procuraduría de la Familia, esta dependencia es la que se encarga de retirar a los menores de sus casas”.
En los albergues del DIF, se les proporcionan todos los cuidados que requieren para su buen desarrollo, además del apoyo psicológico para superar cualquier trauma derivado del trato que recibieron de sus padres.
“Las 24 horas de los 365 días del año, en los albergues se les brinda toda la atención necesaria: alimentación, educación, ropa, atención médica, cuidados, en fin, todo, y ahí permanecen hasta que la Procuraduría de la Familia realiza sus investigaciones y determina qué es lo mejor para el menor”.
Para muchos niños, reconoció la funcionaria, es difícil adaptarse a vivir en un albergue, pues a pesar de que sus padres los maltratan o no los cuidan bien, es el único medio que conocen y hasta extrañan a su familia, “otros desde el primer día se sienten felices”.
“Es muy importante que la ciudadanía reporte los casos de maltrato infantil o de omisión de cuidados, porque los niños pueden morir si no reciben la atención que necesitan, ellos no se pueden defender de un golpe o cuidarse solos”.
