AGENCIAS
CISJORDANIA.- El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmoud Abbas declaró ayer fuera de la Ley a la milicia del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas), al que pertenece el primer ministro, Ismail Haniye.
El anuncio fue dado a conocer por el portavoz de Mazen, el ex ministro de Cultura e Información, Yaser Abed Rabo, en la ciudad de Ramallah.
Abed Rabo afirmó en nombre del presidente que esa ?fuerza auxiliar? es ?ilegal?, y que para ello tendrá que quedar bajo control de los organismos de seguridad dependientes de la ANP.
El anuncio se efectuó dos días después que miembros de la Fuerza de Hamas atacaron la casa de un comandante de seguridad en Gaza, matándolo a él y a siete guardaespaldas.
El comandante era integrante de la Fuerza Preventiva de Seguridad, leal al partido Al Fatah de Abbas.
?En vista al persistente caos de la seguridad y de los asesinatos a nuestros combatientes ... y en vista al fracaso de las agencias que existen y del aparato de seguridad para imponer la Ley y el orden y proteger la seguridad de los ciudadanos, el presidente Mahmoud Abbas decidió reformar las Fuerzas de Seguridad y su liderazgo y considerar a la Fuerza ejecutiva (Hamas), a sus funcionarios y miembros, ilegales y fuera de la Ley?, expresó la oficina de Abbas en un comunicado.
Por su parte, el portavoz de Hamas, Fauzi Barhoum, calificó de ?fuera de lugar? e ?innecesaria? la decisión del presidente palestino, Mahmoud Abbas, de poner fuera de la Ley a su milicia o ?Fuerza ejecutiva?.
Según Barhoum, ese decreto presidencial deja echada la suerte de los milicianos islámicos que desde hace unos meses formaban parte del cuerpo conocido como ?Fuerza auxiliar? o ?ejecutiva?, creada por el ministro del Interior, Said Siam, y ya en el momento de su fundación considerada ilegal por Abbas.
Se trata de una Fuerza de milicianos, con tres mil efectivos, creada por Hamas y el Gobierno del primer ministro, Ismail Haniye, que operaba simultáneamente con las Fuerzas de Seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), cuyos efectivos son de Al Fatah y leales a Abbas.
Según observadores palestinos en Gaza, el decreto de Abbas puede agravar la violencia entre los dos bandos y que la población quede, una vez más en los últimos meses, bajo la amenaza de una guerra civil.
