Consejos para sacar el máximo rendimiento. (PIXABAY)
En muchos hogares es común que haya alguna moneda antigua e incluso varias que se han ido conservando con el tiempo. Conviene tener en cuenta que se puede llegar a sacar un buen dinero por ellas.
El primer paso consiste en averiguar sus características y su cotización, y un buen consejo es el de considerar dónde nos van a pagar mejor por las monedas. Como ocurre con otros productos de valor, suele resultar mucho más rentable vender monedas antiguas en Estados Unidos que en México. Y para hacerlo hay que realizar buenas fotografías y decidir, entre otras elecciones, si se quiere vender por lotes o de manera individual. Además siempre se debe dar una descripción incluyendo aspectos como el material y la pureza de la moneda, la fecha de su cuño, y una indicación lo más exacta posible de su estado de conservación.
Hay verdaderos tesoros de la antiguedad que pueden resultar muy valiosos. Existen muchos lugares en internet en los que se pueden ofrecer las monedas pero antes conviene realizar una valoración con especialistas que hagan la evaluación y sepan orientarnos sobre el valor de los artículos. Y antes de poner el anuncio en un portal de la red de internet, hemos de asegurarnos de que sea confiable el sitio para evitar estafas o un precio por debajo de su valor real. Además hay que tener cuidado con los datos personales que se proporcionan para registrarse y anunciarse en estos sitios, de ahí la importancia de que se trate de un portal fiable.
Del mismo modo hay que cerciorarse de que el comprador sea de fiar ya que en este sector aparecen en ocasiones supuestos compradores interesados que aprovechan el desconocimiento en numismática del vendedor para realizar una jugada engañosa. Igualmente hay que tratar de evitar a revendedores y tratar de vender sólo a verdaderos coleccionistas.
Decenas de nuevas monedas se cotizan a diario en la red y las más codiciadas son las que tienen una mejor conservación.
Consejos para conservar el valor de las monedas
En primer lugar, hay que tener en cuenta que si la moneda tiene pátina, que es esa capa fina de óxido de color verdoso o morado que se forma a causa de la humedad y del paso del tiempo, nunca hay que quitarla puesto que es un reflejo del valor que tiene debido al paso del tiempo.
Al limpiar la moneda no se debe frotar con algún otro material que pueda dañarla. Lo mejor es hacerlo con algún tipo de toalla especial y suavemente frotar la moneda con una mezcla de agua tibia, jabón neutro y aceite de oliva. Antes de eso se puede hacer una mezcla de alcohol y sal en la que dejar las monedas sumergidas durante al menos unos tres días. Para que podamos hacer un cálculo, la proporción sería de tres cucharadas de sal por cada vaso y medio de alcohol. Tras este proceso se pueden enjuagar con agua fría y secar con papel absorbente.
Hay que cuidar de la conservación de esas monedas que tenemos la intención de vender porque el estado en el que se encuentren es un factor principal a tener en cuenta a la hora de fijar su precio de venta. A esto hay que sumar evidentemente la autenticidad de la moneda, su antigüedad y el material del que está hecha.
Evidentemente no siempre es fácil saber cómo vender las monedas antiguas que conservamos en casa, a qué precio o a quién venderlas. Pero si seguimos estos sencillos consejos y prestamos atención, podremos obtener un ingreso extra con esas monedas.
